domingo, 15 de noviembre de 2015

A mi Cristo


¿Te acuerdas cuando nos quedábamos solos con el silencio por único acompañante?

¿Recuerdas que intentaba rezarte y de mis adentros solo salían silencios que no dejaban pronunciarme?

La tenue luz iluminando tu cara. Tu cara iluminando mi alma. Mi alma buscando tu paz. Mi paz al contemplar tu mirada.

Seguro que no te olvidas de aquellas frugales visitas, como yo no me olvido de amarte cada día a pesar de la distancia.



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Gracias por comentar. Este blog está registrado en Safe Creative®