martes, 26 de abril de 2016

Desvarío



Digamos que no sé dónde dejar de mirarte.

Digamos que si fueses mar me ahogaría por amor.

Digamos que es fácil perderse en ti; por ti; contigo.

Digamos que la felicidad consiste en un <<solo los dos>>.

Digamos que tu mirada es fiebre, y el bálsamo tu voz.

Digamos que eres esa droga que se convierte en adicción.

Digamos que querer y amor no siempre es lo mismo: posesión y devoción.

Digamos que desvarío solo porque me he fijado en ti, y tú no sabes que existo.